***Participación del Presidente Calderón en la Segunda Sesión Plenaria con el tema: Seguridad Energética en el marco de la Cumbre...*
*Discurso del Presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa :
Gracias, Primer Ministro.
Buenas tardes estimadas amigas, estimados amigos.
Primero me refiero a la seguridad energética.
Vivimos en años recientes una situación verdaderamente excepcional en términos del mercado energético y, efectivamente, la vulnerabilidad que expresó esa situación fue particularmente aguda para los países de nuestro continente, que carecen de los recursos suficientes para satisfacer sus propias demandas.
De ahí que uno de los temas que debemos enfocar en esta Cumbre es cómo lograr la seguridad energética de América. Y a ello quiero referirme, puntualizando algunos temas.
Uno, es impulsar la interconexión y la integración de un mercado americano de energía que sea eficiente. No me refiero únicamente al caso del petróleo, en el que la demanda de América, entendida como continente, se puede perfectamente compensar con la oferta de varios países productores en la región, sino en la necesidad de integrar mercados regionales y continentales de energía.
Por ejemplo, nosotros a la vez que somos un país productor de petróleo, somos importador de gas natural y otros energéticos. Y para nosotros es un privilegio poder usar en la vida diaria de los mexicanos el gas natural que es producido aquí en Trinidad y Tobago. Se transporta por mar y es regasificado en el Golfo de México; de la misma manera que estamos también por importar gas natural de Perú.
De la misma manera, pensamos que podemos avanzar y debemos avanzar hacia un mercado integrado de electricidad. Primero por regiones, como ya se ha dicho.
Y el caso de Paraguay es emblemático, la provisión de electricidad a varios países de la región; pero en el caso nuestro pienso que debemos buscar el logro de una red continental de energía eléctrica.
Nosotros estamos avanzando en esa materia. Ya nos hemos interconectado con una región del mercado de energía eléctrica en Estados Unidos. Estamos proveyendo de energía eléctrica a Belice y, a partir de las próximas semanas, tenemos la buena noticia de que vamos a poner en marcha la primera red de electricidad hacia Centroamérica, empezando ya a funcionar y proveer electricidad hacia Guatemala. Ya con mi amigo Álvaro Colom estaremos próximamente inaugurando esta red.
Pienso que esta red debe de conectar a toda Centroamérica, e incluso llegar a conectar Sudamérica con Centroamérica y Norteamérica. Una red continental de energía que es factible hacer.
Y pienso que lo mismo podríamos generar no sólo en el mercado petrolero sino en el mercado de gas.
En segundo lugar, un programa continental para hacer un uso más eficiente de la energía y ahorrar el gas. Programas que han sido exitosos, por ejemplo, para la sustitución de electrodomésticos. Ya se ha hecho en Cuba, ahora que es tan mencionada, por cierto, donde se han sustituido todos los focos y todos los refrigeradores de las casas de la Isla por ahorradores de energía. Podemos hacer un esfuerzo similar.
En tercer lugar, diversificar las capacidades de recursos energéticos. América, y particularmente América Latina y el Caribe, tienen un enorme potencial para poder visualizar hacia fines de este siglo un transporte movido a base de biodiesel.
Dadas las condiciones climatológicas e hidrológicas de nuestra región es posible generar biodiesel y etanol suficiente como para ser la región que más impulse su transporte y su parque automotriz, como ya lo ha hecho Brasil, a partir del uso de biocombustibles.
Todo ello, además, reclama que podamos tener verdaderamente un financiamiento adecuado y oportuno para alcanzar nuestra seguridad energética.
Y nuevamente, y para concluir, diría que el mecanismo más adecuado es un mecanismo que combine, por un lado, la aportación de cada país en función del ingreso per cápita, de las emisiones per cápita, y una combinación de estas variables a un fondo multinacional y, a la vez, que cada país pueda retirar de ese fondo para financiar su proyecto, sea de energía renovable, de ahorro de energía, de reducción de emisiones o de secuestro de carbono.
Lo mismo podemos financiar el cambio de electrodomésticos o de lámparas de luz en todos los hogares de América, y con eso ahorrar energía, ahorrar dinero, ahorrar emisiones, como también generar esta transición fundamental hacia combustibles renovables a partir de etanol o biodiesel o bien impulsar proyectos de generación alternativa, desde los proyectos hidroeléctricos de minihidráulica en toda América, donde nuestro continente todavía tiene un potencial no explotado, hasta los proyectos de geotermia en El Salvador o proyectos eólicos.
En México iniciamos ya el primer parque eólico en América Latina. Están funcionando ya casi 200 megawatts de energía eólica y pensamos, a finales de mi Administración, en el 2012, contar con capacidad de casi tres mil megawatts a partir de energía generada por el viento y una cantidad considerable también a partir de energía solar.
Todo eso es financiable a partir del Fondo Verde, que insistentemente proponemos, y dado las limitaciones en tiempo, nosotros estamos dispuestos a correr un modelo, y si cada quien tiene curiosidad no sólo con cuánto podría participar en el Fondo, sino cuántos proyectos podría financiar a partir de ese Fondo, con mucho gusto, tenemos una estimación, un modelo que hemos corrido, que nos permitirá llegar a una propuesta continental hacia la Cumbre de Copenhague, a finales de este año, que permita abrir un camino de solución alternativo no sólo que dé seguridad energética a América, sino que también dé el paso inicial que está haciendo falta para combatir globalmente el problema de cambio climático.
Muchas gracias, señor Primer Ministro.
Puerto España, Trinidad y Tobago
por José Antonio Monterrosas Figueiras.
Sala de Prensa del Gobierno Federal
18 de Abril de 2009
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